Powered by Castpost
Y cuando todo va mas rápido solo queda dejarse llevar…
Tras noches eternas con los amigos, de pubs, de exceso de Masivo, de continuar la noche-madrugada-mañana en el departamento de una amiga para no terminar el “carrete” he quedado absolutamente destruida pero feliz.
Se que debo seguir saliendo, continuar con el proceso de buscar otros mundos para terminar el proceso de “luto” como lo calificaron anoche. Y no se si en verdad mis sentimientos son como los describieron, al menos no poseo totalmente la certeza de que se les pueda agrupar bajo aquel encabezado… Solo admito que duele demasiado y que “estoy aplicando cabeza” para seguir adelante.
Admito que poseo una venda en los ojos; que no deseo ver, que me muestro distante y fría cuando conozco a un hombre. No es el miedo a la puñalada por la espalda, a que me traicionen… Tengo pánico a que no me vea. Ese es mi gran temor. Entonces me pongo “el parche antes de la herida” y me mantengo distante, ahorro la desilusión de que otro mas no me vea. Porque me se completa y soy feliz con lo que soy, lo que busco es una almita que este igual de completo que yo para crear un tercer mundo con los aportes de ambos.
Vaya… No costó sangre escribirlo!... Aunque no se si me di a entender…
Así pues, me pidieron que me sacara la venda. Nada simple pero es un desafío que me provoca, en cierta medida, pues implica que deberé enfrentar aquel demonio y ganar la batalla. Creo que la felicidad, pese a su subjetividad, requiere trabajo; debo trabajar en quitarme esta venda porque solo me juego en contra al persistir en esta postura.
Este es mi nuevo propósito.
Es increíble y no deja de asombrarme, como nos marca el pasado en nuestro presente y futuro.
Me siento feliz. Las últimas semanas me había incrustado en los estudios y salir con mis amigas me permitió centrarme en ellas, en mi ¡¡Extrañaba tanto eso!! Y en regalo, pues se que se un obsequio del destino, conocí a dos almitas maravillosas que solo tenía por conocidas hasta aquel entonces. Gracias por haber confiado en mi, por compartir sus vivencias, sus sueños y temores. Hay personas que nos devuelven la fe en el ser humano y ellas son parte de aquel universo escaso.
Son las personas que quiero tener en mi vida siempre.
Pues bien, pongo fin al monólogo. Que tengan una maravillosa tarde!
Canción del Momento: Cinnamon Girl de Type O Negative, cover de Neil Young. Disco: October Rust. Recomendable!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario